Justin sostuvo mis mejillas con sus manos mientras nos dabamos un hermoso besos, uno de esos verdaderos. Justin paró de besarme y me miró.
-Te amo princesa- Dijo sonriendo tiernamente.
-Yo te amo mas- Sonreí.
Me besó de nuevo.
-¡Justin! Tu mamá acaba de llamar, de una vez le dije lo del almuerzo, dijo que estaría aquí en 1O minutos- Dijo mamá desde el otro lado de la puerta.
-¡Está bien señora _______(Tu apellido)!- Gritó Justin.
Se escucharon los pasos de mamá bajando las escaleras.
-¿Qué crees que diga tu mamá?- Pregunté haciendo una mueca.
-No lo sé, creo que le encantará la idea de que tu seas su yerna- Dijo sonriendo.
-¿Crees que reaccionará como reaccionó mi mamá?- Pregunté riendo.
-Creo que peor- Respondió & los dos reimos.
-Tengo que ponerme algo que impresione a tu mamá- Dije levantandome de la cama y yendo al armario.
-Con todo te ves hermosa- Dijo y me sonrió.
-No digas esas cosas..me sonrojas- Dije riendo nerviosamente.
-Aaah, asi que te sonrojo..- Dijo levantandose de la cama y yendo hacia mí.
Se acerco tanto a mí que estaba entre el armario y su cuerpo, ¿alguna escapatoria? no. Justin comenzó a besarme lentamente, disfrutabamos cada uno de nuestros besos, sus besos me demostraban amor, cariño, ternura, sinceridad..
Me faltaba la respiración, me separé, lo miré y le sonreí.
-Como que eres adicto a los besos ¿no?- Dije riendo.
-Claro y..mas a los tuyos- Dijo, me dió un beso fugaz y regresó a la cama.
Suspiré, volteé al armario y lo abrí, tengo toda clase de ropa, pero en realidad no tenía ni idea de qué ponerme.
-Justin...¿podrías...salirte? Me vestiré- Dije mirandolo.
-¿Y por qué no te vistes en el baño?- Preguntó.
-Bueeno..- Dije.
Tomé mi ropa & entré al baño cerrando la puerta con seguro.
Me puse esto:
Salí.
-Wooow, ¡Estas hermosaa!- Dijo con los ojos como platos.
-Gracias- Dije sonrojada.
-Te dije que con cualquier cosa te ves hermosa..- Dijo sonriendo.
Reí, me ví en el espejo, saqué mi maquillaje y comenzé a maquillarme, luego a peinar mi cabello.
-¿Estan listos?- Preguntó mamá tocando la puerta y luego la abrió.
-______ como siempre maquillandose- Dijo Justin riendo.
-Bueno..Pattie y yo decidimos salir a algun restaurante, así que vamonos ya- Dijo.
Tomé mi bolso y bajamos. Pattie estaba sentada en el sofá.
-Wow...que yerna tan hermosa tengo ahora- Exclamó Pattie al verme.
Reí nerviosamente.
-Bueno, ¿nos vamos?- Preguntó mamá.
-Sí, vamos- Dijo Pattie.
Salimos de la casa y nos montamos en la camioneta de mamá. Justin y yo nos sentamos atras y nuestras madres adelantes. Justin íba con su brazo rodeando mis hombros, íbamos riendo y besandonos.
-¡Chicos! Ya dejen de besuquearse- Dijo mamá riendo.
-Mamaaaá- Dije en señal de que me estaba avergonzando.
-Lo siento cariño- Rió.
Justin y yo reimos de nuevo mientras él jugaba con mi cabello, ¡Amaba que un chico jugara con mi cabello!
-¡Llegamos!- Exclamó mamá estacionandose.
Llegamos a nuestros restaurante favorito, era así:
Nos sentamos en esas mesas. Cuando nos sentamos llegó un mesonero, hicimos nuestros pedidos y este se retiró.
-Entonces...son novios..- Dijo Pattie tratando de analizar sus palabras.
-Mamá..- Dijo Justin casi fulminandola con la mirada.
-Chicos, entiendan, es dificil para nosotras, siempre fueron mejores amigos- Explicó mamá.
-¿Por eso tienen que avergonzarnos?- Pregunté.
-No estamos avergonzandolos- Dijo Pattie riendo con mamá.
-Cariño...vayamos a caminar un poco- Dijo Justin tomandome de la mano y llevandome hacia el patio trasero del restaurante.
Llegamos a un hermoso jardin donde estaban unos parques donde habían niños jugando. Nos sentamos en unos columpios.
-¿Estas molesto con tu mamá?- Pregunté mirandolo.
-No..sólo que..a veces puede llegar a ser fastidiosa- Dijo haciendo una mueca.
-Lo sé, te entiendo, la mía tambien- Dije riendo.
-Así son las mamás- Dijo sonriendo.
-¿Por qué no pueden entender que estamos juntos y ya?- Pregunté.
-No lo sé..- Dijo y me miró, con sus hermosos ojos color miel y me tomó la mano.
-Te amo..- Susurró y me sonrió.
-Pues..adivina, yo te amo mas- Reí.
-Sí que eres traviesa- Rió.
-Sí lo soy y lo sabes- Dije riendo.
-Veamos que tan traviesa llegas a ser..- Dijo mirandome.
Reí y comenzé a correr por todo aquel parque, casi no habían niños por lo que no nos preocupamos, ademas el parque era lo suficientemente grande. En una de esas tropezé y caí en el cesped, él cayó sobre mí.
-Sí que eres traviesa- Dijo riendo.
-Te dije- Sonreí.
Él me miraba los labios y luego los ojos y continuaba haciendolo, luego no pudo más y me besó, en ese momento no me importaba si habían niños ahí o si íba a llover, porque en realidad íba a llover, todo lo que me importaba era disfrutar de aquel beso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario